"Actuar es fácil, pensar es difícil; actuar según se piensa es aún más difícil"

UNA TRISTE NOTICIA

oya
Al final de la semana pasada nos llegaba la noticia de que había fallecido Vicente Oya Rodríguez, Cronista oficial de la provincia de Jaén, de la Ciudad de Jaén, periodista, escritor y sobre todo una gran persona, que nos dejaba con el silencio y la prudencia que le caracterizaba a este buen hombre, del que en estos días hemos podido leer grandes cosas y sobre todo grandes halagos, que circulan por doquier, por todos medios de comunicación, por las redes sociales o por cualquier esquina de Jaén.
Había tenido la ocasión de saludar un par de veces en persona a Vicente Oya, pero recuerdo muy bien un par de llamadas de teléfono que me hizo esta gran persona. La primera fue cuando empecé a escribir mi columna semanal en el periódico, en la cual hice mención de él, al sentirme orgulloso de ser compañero de columna de este gran hombre, no tardó ni un sólo día en llamarme por teléfono para agradecerme el que lo hubiera mencionado en mi columna, a la vez que me dio muchos ánimos para que esta labor de columnista que yo acaba de iniciar, no decayera en mí, al igual que lo había hecho en él, pues contaba ya con más de veinte años en sus espaldas como colaborador de este periódico.
La segunda llamada y que jamás olvidaré, va a hacer casi un año, fue cuando falleció mi padre, y la verdad que recibir una llamada tan entrañable como la de Vicente Oya, en esos momentos que para cualquiera son bastante duros y difíciles, te reconforta, y reconozco que en aquellos momentos sirvió para subirme la moral de una manera impresionante cuando la tenía por los suelos por tan dolorosa pérdida.
La verdad que Vicente Oya, era un hombre prudente y conciliador donde los haya, con el que daba gusto compartir cualquier momento, en persona, leyendo sus artículos, escuchándolo al otro lado del teléfono o como fuese. En definitiva era una persona de buenos principios y por supuesto de buenos consejos. Por eso su muerte nos ha cogido a todos a contrapié, porque casi no nos la esperábamos y al recibir la noticia, por lo menos yo, me quedé bastante sorprendido por tan lamentable pérdida.
Ahora que ya no está entre nosotros, debemos todos seguir sus sabios y buenos consejos, y buscar la calma para la resolución de las cosas, porque su voz se ha apagado, pero sus vivencias, sus consejos y sus artículos que ininterrumpidamente durante muchísimos años se han publicado en este periódico, siguen ahí, y que cada uno de ellos siempre ha sido una lección magistral, donde nos ha enseñado y con él hemos aprendido muchas de la cosas y cuestiones que a cualquier ciudadano, nos dejan grabadas a fuego para que no se nos olviden en la vida.
Ha sido un orgullo durante mucho tiempo compartir página cada viernes con esta buena persona, a la que he leído con detenimiento y pasión, porque me han servido para culturizarme y sobre todo para aprender mucho de él, porque su mesura me hacía el ver ese estilo de delicadeza y moderación a la hora de tratar cualquier tema en el que ponía su pluma y sobre todo su énfasis de tal manera que la mayoría de las veces me dejaba con la boca abierta de su tan agradable lectura.

No hay comentarios: