El
próximo día 22 de marzo se celebra el día mundial del agua, que fue propuesto
en la Conferencia de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente y el
Desarrollo efectuada en Río de Janeiro, Brasil del 3 al 14 de
junio de 1992. Después de la cual, la Asamblea General de las Naciones
Unidas adoptó el 22 de diciembre de 1992 la resolución
A/RES/47/193 que declaró el 22 de marzo de cada año como Día Mundial del
Agua. Invitando entonces a los diferentes Estados a consagrar este día, en el
marco del contexto nacional, con la celebración de actividades concretas como
el fomento de la conciencia pública a través de la producción y difusión de
documentales y la organización de conferencias, mesas redondas, seminarios y
exposiciones relacionadas con la conservación y desarrollo de los recursos
hídricos así como con la puesta en práctica de las recomendaciones de la Agenda
21.
Esto
visto así parece no tener demasiada importancia, pero la repercusión que el
agua tiene en la sociedad es básica para cualquier desarrollo, puesto que de no
disponer del líquido elemento supone el no poder realizar y llevar a cabo
muchas actividades en la que el agua se convierte en el factor limitante para llegar
a buen término ese desarrollo que cualquier sociedad desea, limitando en la
gran mayoría de los casos el propio bienestar de la sociedad, puesto que para
eliminar los múltiples problemas relacionados con el agua, debemos trabajar con
un espíritu de cooperación urgente, con mente abierta a las nuevas ideas y la
innovación, y dispuestos a compartir las soluciones que todos necesitamos para
un futuro sostenible.
Cada
año el día mundial del agua se celebra con un lema, y sí en el año 2015 el Día
Mundial del Agua se dedicó a la relación de este preciado bien con el
Desarrollo Sostenible. Para este año 2016 el tema no puede ser más recurrente,
vinculando el agua y el empleo. Porque Una gota de agua es flexible. Una gota
de agua es poderosa. Una gota de agua es más necesaria que nunca. El agua es un
elemento esencial de la vida. Pero es más que esencial para calmar la sed o la
protección de la salud; el agua es vital para la creación de puestos de trabajo
y apoyar el desarrollo económico, social y humano.
Sin
agua no podemos tener desarrollo, sin agua difícilmente se puede generar
trabajo o empleo alguno, ya que la generación de puestos de trabajo en
cualquier actividad o sector dependerá en gran medida del agua que podamos
disponer en cada momento y sobre todo del agua en condiciones óptimas para su
uso y su disponibilidad. Los recursos hídricos, y la gama de servicios
que prestan, juegan un papel clave en la reducción de la pobreza, el
crecimiento económico y la sostenibilidad ambiental.
Siempre
se ha dicho que las personas pueden vivir sin comer, pero nunca sin beber, por
eso tenemos que ser cada vez más conscientes que el agua no es sólo necesaria,
sino más bien imprescindible, por eso tenemos que ser consecuentes para que
cada vez que vemos el agua correr, nunca se nos olvide que sin agua no sólo no
hay trabajo sino que no hay vida.