Desde nunca le ha gustado al Partido Popular la Ley de la Dependencia que
promulgó el Partido Socialista Obrero Español y nunca ha apostado por ella ni
ha visto las bondades que esta Ley presentaba para la ciudadanía y sobre todo
las personas dependientes que se encontraban en una situación de cuasi
marginalidad y desamparo, muchas de ellas sin apenas posibilidades de poder
tener una atención y cuidados que su estado requiere en cada momento.
Esta ley que había venido a hacer justicia y corregir el déficit que
había con las personas dependientes desde que si se instauró la democracia.
Poniendo en manos de los Ayuntamiento y Diputaciones, una herramienta básica
para que la vida de muchas personas pueda ser un poco más favorable con el
apoyo de muchos de los cuidadores y cuidadoras que para dar cumplimiento a la
misma habían sido contratados, principalmente por las empresas concesionarias
que son las que se encuentran prestando el servicio de ayuda a domicilio.
Pero ahora el Ayuntamiento de la Capital del Santo Reino, se ha
desmarcado diciendo que a partir del próximo mes de diciembre, ya no volverá a
prestar el servicio de ayuda a domicilio que venía prestando y que tenía
convenido con la Junta de Andalucía. Dejando de atender a muchas personas para
los que ésta ayuda resultaba ser imprescindible, pues se tratan de personas
dependientes y en su inmensa mayoría de muy escasos recursos, a los que sin el
servicio que se les presta, la vida les
va a ser demasiado difícil por no decir imposible, pues debido a su
dependencia, no pueden pasar el día sin esa ayuda que les limpia la casa, los
baña o les prepara la comida entre otras cosas.
Resulta que hace unos pocos meses, el Señor Alcalde, Don José Enrique
Fernández de Moya, rescindió el contrato con la concesionaria Macrosad,
aludiendo que no estaba prestando el
servicio como era debido, aunque en el trasfondo de todo estaba la militancia
política en el PSOE de su Gerente Andrés Rodríguez, que era realmente lo que
ocurría y no que el servicio no se prestara de manera adecuada, poniendo en
bandeja la ayuda a domicilio a otra empresa que sí era de la cuerda del Partido
Popular y que en definitiva pasaría por los postulados que el Alcalde en un
principio pretendía.
Pero ahora se denota que el problema no era Macrosad o su Gerente Andrés
Rodríguez, sino que queda bien claro que
el problema una vez más es la pugna política, el problema es llevar esta
confrontación política hasta el extremo máximo, importándoles muy poco las
consecuencias que esto pueda acarrear para los habitantes de esta ciudad. Y una
vez más el Alcalde se ha pasado de frenada, y ahora por la confrontación
política con la Junta de Andalucía deja en la cuneta a cientos de dependientes
de esta Ciudad, abandonados a su suerte a ver si alguien quiere hacerse cargo
de ellos de una u otra manera.
Sería necesario poner un poco de cordura en todo esto, y colectivos como
el de los dependientes no meterlos en el todo vale en la política, porque
detrás de cada uno de ellos o detrás de cada cuidador o cuidadora, hay una gran
drama sobre los que el Alcalde debe tener mucho cuidado en no jugar con ellos,
por querer arañar un puñado de votos, o como en este caso debilitar a la Junta
de Andalucía, dejando vacía de contenido una Ley en la que el Partido Popular
nunca ha creído.
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