Hace unos cuantos días que el Diputado en el Congreso,
Gabriel Rufián, soltó una de sus patochadas a las que nos tiene acostumbrados,
sólo que esta fue mayúscula, usando como conejillo de indias a los escolares de
nuestra provincia, cuando a este buen señor, por llamarlo de alguna forma, se
le ocurrió decir, que con “sus
impuestos” se paga el comedor de sus primos de Jaén. Menuda infamia que se le
vino a la mente a este Diputado Español, que es un experto en crear polémicas,
para tener alimentado su circo mediático y de paso que sus palmeros de Esquerra
Republicana de Cataluña, lo continúen jadeando y aplaudiendo cada vez que
suelta una de estas.
La salida de tono de este personaje,
ha levantado ampollas en nuestra provincia, por aquello de la imagen, que de
nosotros quieren continuamente estar transmitiendo este tipo de personas, que
no se dan cuenta que eso no le va a servir de coartada para esos pensamientos
que parecen ser tan liberales, al final resultan ser los más retrógrados del
mundo, y a buen seguro que le pasará una cara factura el hacer estas
declaraciones sin tener en cuenta la repercusión que las mismas puedan tener de
cara a la sociedad y sobre todo de cara a la provincia en la que el señor
Rufián hunde su raíces.
Este hombre debe saber que con
mis impuestos también se paga su sueldo y las dietas de las que disfruta por
ser Diputado en el Congreso de los Diputados, de esa España que el tanto
reniega y de las que tantas ganas tienen de salir. Además también se pagan las
carreteras Estatales que hay en Cataluña, el Aeropuerto, el Puerto o el famoso Fórum Universal de las Culturas, que se celebró en
Barcelona allá por el año 2004, que conviene recordarlo para aquellos que como
el Señor Rufián son bastante cortitos de memoria y no dan mucho más de sí, tan
sólo para unas pequeñas declaraciones de este tipo.
Pero también Rufián debería saber, que las Comunidades
Autónomas, tienen una serie de tributos cedidos por el Estado, en Andalucía, en
Cataluña o el cualquiera de las diecisiete Comunidades, para que los recauden
ellas y los gestionen como más acorde con sus políticas sea. Siendo esto el
quiz de la cuestión, pues mientras que nuestra Comunidad Autónoma lo gasta en
hacer políticas sociales, entre ellas las becas de comedor, o la ley de la
dependencia o el pago de las matrículas de los estudiantes universitarios que
aprueban todas las asignaturas. Cataluña, o más bien sus gobernantes, muchos de
ellos del partido del Rufián, lo mal gastan en un proces que ni ellos mismos
saben a dónde les va a llevar. Proces sobre el que han echado millones de
euros, quitándolos de esas políticas sociales que tan necesitadas están sobre
todo las clases medias y bajas de este país y las de Cataluña también.
Por lo tanto, Señor Rufián, no mire como se gasta el
dinero de sus impuestos en Andalucía, que aquí está bien empleado. La pena es
que con los míos ustedes lo estén mal gastando un proceso independentista
aciago, derrochándolos sin piedad ni miramiento alguno, en temas tan estériles
como los que estamos todos viendo de una independencia de Cataluña que lo único
que va hacer y está haciendo es arruinarla a ella y por supuesto a los
catalanes y catalanas que son lo que de verdad están padeciendo sus
impertinencias.
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