El
principio de inocencia o presunción de inocencia es un principio jurídico penal
que establece la inocencia de la persona como regla. Solamente a través de un
proceso o juicio en el que se demuestre la culpabilidad de la persona, podrá el
Estado aplicarle una pena o sanción. La presunción de inocencia es una garantía
consagrada en la Declaración Universal de los Derechos Humanos en tratados
internacionales sobre derechos humanos como, por ejemplo, la Convención
Americana sobre Derechos Humanos o la Convención Europea de Derechos Humanos.
Cualquiera
que empiece a leer mi artículo, dirá ya esta Rafa tratando de darnos una clase
de Derecho, nada más lejos de eso, el empezar con esta sucinta explicación de
la presunción de inocencia, es como consecuencia de los acontecimientos
judiciales que han ocurrido esta semana, respecto de Irene Sabalete y el Consejero
de Economía y Conocimiento de la Junta de Andalucía, Antonio Ramírez de
Arellano, a los que se les ha archivado las causas que tenían abiertas en los
tribunales, al no encontrar los jueces indicios de delitos por los hechos de
los que se le estaban acusando y que tan revuelo mediático habían formado sobre
todo los políticos de la oposición.
Ahora
que la justicia declara a estas personas inocentes, me pregunto yo, sí era
necesario el detener a Irene Sabalete a las nueve de la noche en su casa,
llevarla esposada a los Juzgados de Sevilla ante la Jueza Ayala, y armar este
revuelo mediático, que ahora se diluye como un azucarillo, pero que en su día
causó un daño terrible en primer lugar a su persona, a la que se le sometió a
una condena en los medios de comunicación y sufrió la burla y el escarnio de
buena parte de la sociedad, sin piedad alguna. En segundo lugar detrás de este
gran montaje, lo que vemos que subyace es el intentar desprestigiar al Partido
Socialista de la manera que sea, incluso humillando y ultrajando a su cargos
públicos, con la connivencia de algunos
Jueces que se prestan a este juego sucio.
Lo
mismo ha ocurrido con el que fuera Consejero de Economía y Conocimiento de la
Junta de Andalucía, Antonio Ramírez de Arellano, sobre el que El TSJA no ve
indicios suficientes prevaricación y falsificación y ha acordado el
sobreseimiento provisional y archivo de las diligencias abiertas, al considerar
que no existen indicios suficientes de la comisión de los delitos de
prevaricación y falsificación en la adjudicación de la construcción del
edificio universitario de Espacios Tecnológicos, conocido como Centrius.
La
verdad es que resulta penoso ver como esos políticos de medio pelo, tratan de
pescar en los Juzgados, lo que no le dan las urnas. No encomendándose a otra
tarea más que la de judicializar día por día la política y por supuesto las
decisiones que manan de los que al frente de algún cargo público se encuentran.
Seguramente que ahora ninguno de esos que en su día agitaron tanto cualquiera
de las detenciones que de manera espectacular se producían, vendrán a pedir
disculpas con educación y respeto hacia quien ha dicho un juez que es inocente
y por lo tanto no tiene responsabilidad penal alguna y por supuesto tampoco
política, cuando estos mediocres políticos se apresuraron en otorgársela sin
rigor alguno y ni el más mínimo respeto a la presunción de inocencia.
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