ESCÁNDALO REAL

La Monarquía Española vive días convulsos y de desesperación, que no hacen otra cosa que desprestigiar la institución y situarla entre los problemas que se ven con prioridad en la ciudadanía Española, de tal manera que ya hay una gran mayoría de Españoles y Españolas, que piensa que es una institución vieja y obsoleta y del todo inservible para la configuración de un Estado Español moderno en el siglo XXI.

El Rey ha cumplido 76 años sin ninguna celebración ni salida pública oficial, pues a buen seguro los asesores de la Casa Real, le habrán indicado que no están las cosas como para hacer aspavientos y que la sociedad vea que la Casa Real se lo pasa en grande mientras la población española sufre y se indigna con cuestiones como la imputación de la Infanta Cristina, por  “supuestos delitos fiscales y blanqueo de capitales”, que se inscribe en la instrucción de un caso por presunta corrupción abierto en 2010 entre cuyos principales sospechosos figura su esposo, Iñaki Urdangarin.

Ésta imputación de la segunda hija del Rey, por tan bochornoso delito en la época en que vivimos, pone en jaque la Institución de la Monarquía Española, otra veces tan valorada y querida por este pueblo, y que tuvo un caudal de confianza que le entregaron todos los Españoles, cuando tras la larga dictadura se daba paso a una transición política que según todos los analistas de este país, fue modélica y de la que el Rey fue pieza clave para el asentamiento definitivo de la democracia en España.

Esa gran confianza puesta al servicio de la Corona, está claro que no era un cheque en blanco para que el Rey y su familia, pudiese hacer de su capa un sallo, pues no se nos puede olvidar que el Estado de Derecho que se implanto tras la Constitución de 1.978, nos deja a todos los ciudadanos Españoles en igualdad de condiciones ante la Ley, y por supuesto la Casa Real también, con lo que la justicia no puede mirar hacia otro lado y pasar por alto estos indicios de delito, para que de alguna manera queden impunes y no sean juzgados conforme impone el Ordenamiento Jurídico Español.

Era impensable que la Monarquía Española con ese gran caudal de confianza otorgado por el pueblo Español, se pasaran de héroes a villanos en tan poco tiempo, derrochando toda la confianza puesta, de tal manera que si vemos las encuestas del CIS, ahora ya para la ciudadanía española, la Monarquía, es más un problema que una solución, con lo que se hace bueno aquello que tantas veces hemos escuchado todos, de que España no era Monárquica sino Juan Carlista, y más ahora que parece que el Reinado de Juan Carlos I de Borbón toca a su fin, con él también la Monarquía Española.

En una ocasión un Catedrático de Derecho Constitucional de una gran Universidad Española, me dijo que en España habría Monarquía, mientras la Casa Real quisiera, puesto que el pueblo Español la aceptaría siempre y cuando no incurriese en ningún escándalo que dilapidara la confianza en ella depositada. Confianza que en unos cuantos años se han encargado de sepultar y malgastar no sólo por el Rey, sino también por buena parte de su familia, de tal manera que ahora el debate que se instala en la sociedad no es si el Rey abdica o no abdica, sino si es necesario que continuemos con la Monarquía o nos demos una nueva forma de organización política en el Estado, de tal manera que nos haga prescindir de la Monarquía.