Cuando me pongo
delante del ordenador cada semana para escribir el artículo correspondiente a
mi columna, sólo tengo claro que tengo que escribir entre 500 ó 600 palabras
que al fin y al cabo son las que ilustran esa semana mi espacio que tan
gentilmente me cede este periódico, a veces no se qué tema buscar para poder
rellenar ese espacio y expresar mediante
estas cuantas palabras lo que opino de uno u otro tema.
Pero en esta
semana temas no faltarían, pues desde hoy mismo que tenemos las celebraciones
de la Patrona de la Benemérita, se podía escribir largo y tendido de los
recortes que a este cuerpo están afectado y que tocan de lleno en la economía
de un pueblo como Baeza, que con la reducción de alumnos en su academia, pierde
un potencial económico importante en su ciudad como el que son los guardias
noveles que cada curso viven durante unos pocos meses a esa ciudad, gastando y
consumiendo en ella, de tal manera que en la misma se han visto florecer muchos
negocios al rebufo de la academia de la Guardia Civil. Negocios que ahora ven
como se van marchitando poco a poco.
Pero tampoco en
este día tan especial no podía olvidarme del Patrón de nuestra Ciudad del Santo
Reino, el Condestable Don Miguel Lucas de Iranzo, que en su honor se da hoy el
pistoletazo de salida en estos tiempos a diez días de feria que van a llevar a
los Jaeneros y Jaeneras a disfrutar y consumir miles de litros de vino y de
cerveza en las distintas casetas que para la ocasión han sido instaladas en el
ferial como cada año. Feria que muchas veces en tiempos de crisis no apetece, o
apetece poco, pero aquí se cumple ese refrán de que sí no querías caldo toma
tres tazas, y este año que la crisis está haciendo de la suyas en las familias
de esta provincia, se despacha el Ayuntamiento con la feria más larga de los
últimos años y nos deja nada más y nada menos que 10 días de feria que lo más
seguro que casi nadie, salvo los que en ella trabajan, visiten cada uno de esos
días el recinto ferial.
Sorprende de
manera prodigiosa, ayuntamiento y Junta de Andalucía han llegado a un acuerdo para
desatascar el Plan General de Ordenación Urbana de la Ciudad de Jaén, y lo que
hace tan sólo unas semanas parecía que era misión imposible, en unas pocas
horas de reunión se quitan y se ponen unas cuantas viviendas o unos cuantos
centros comerciales y de rebote se construye un Instituto, y ya está el PGOU
arreglado a la antigua usanza. Volviendo a lo que tantos y tantos quebraderos
de cabeza nos está dando, el ladrillo. Y es que el anuncio del cambio de uso
del suelo del polígono industrial de principios de este siglo, a uso
residencial, para la construcción de 5000 viviendas, se nos vende como la gran
solución para salir de la crisis que tenemos sobre nuestras cabezas o
bolsillos, y como dicen en mi pueblo, esto quien lo paga.
Lo cierto es que
cuando los políticos se sientan en la mesa con el fin de darle soluciones a los
problemas de los cuídanos, pues casi lo consiguen y se llegan a los acuerdos
necesarios. A ver si ahora se puede hacer lo mismo con el tranvía, o quizás
tengamos que esperar otro año para la sombra del Condestable, los guie y
podamos beneficiarnos los ciudadanos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario