"Actuar es fácil, pensar es difícil; actuar según se piensa es aún más difícil"

RETROCEDEMOS

Esta semana hemos podido ver como uno de  los máximos dirigentes de Vox, Javier Ortega Smith,  empuñaba un fusil de asalto y realizaba unos cuantos disparos contra un blanco que se había instalado en ese campo de tiro para la ocasión, en la que se ve claramente como ese dirigente político realiza los disparos sin que nadie le molestará y mucho menos tratara de evitar que los mismos se produjeran en un momento determinado, tal como todos hemos podido ver y comprobar ya que además de realizarlos se ha permitido el lujo de publicarlo en todas la redes sociales..
Sorprende y mucho como cualquier persona puede entrar en una instalación militar para hacer uso del material que el ejército dispone, para cualquiera de sus menesteres en esas instalaciones, y que sea puesto a disposición de cualquier persona que nada tiene que ver con el ejército en la actualidad, pero que utiliza su material y armamento como se un militar se tratase, o cuando menos un destacado militar en la actualidad, con destino en ese acuartelamiento y a las órdenes de los mandos que pacientemente miraban como este señor hacia la maniobra o el ejercicio de tiro que estaba realizando.
Pero lo más sorprendente es que un dirigente político se dedique a posturear fusil de asalto en mano, como si de un guerrillero sandinista se tratara, en lugar de preocuparse de los problemas que tenemos todos los españoles en el día a día, aunque la verdad es que estos señores de la ultraderecha viven en una realidad paralela en España que nada tiene que ver con la realidad que nosotros podemos estar padeciendo cada día, preocupándose más de acciones como estas y otras de suma extravagancia con las que nos despertamos cada mañana, tratando de despertar problemas o fantasmas que hace mucho tiempo que desparecieron de nuestro país.
Se le ve venir a esta ultraderecha rancia y casposa, y quizás cuando vengamos a darnos cuenta, nos veamos todos con pistola al cinto y repartiendo justicia como si del lejano oeste se tratase, donde el que más rápido fuese en disparar sería quien se llevaría el gato al agua, siendo este quien impondría su criterio con el valor que le puedan dar la balas en cada momento a este tipo de personas, que nos quieren llevar a una España en blanco y negro de aquellos años treinta del siglo pasado, donde la palabra tenía un valor casi totalmente nulo a favor del miedo y la violencia.
A estos dirigentes políticos se les llena la boca diciendo que no quieren que los niños y niñas de ahora sean adoctrinados, pero se les ve mucho el plumero cuando lo que pretenden es que ese adoctrinamiento sea en una inequívoca dirección, que no es otra que hacia los postulados que ellos promulgan y defienden, con la consiguiente pérdida de libertades y valores sociales que la clase media y trabajadora ha venido conquistando durante décadas con grandes luchas, pero eso sí luchas pacíficas, sin tener que empuñar armas como lo hacen estos personajes.

La verdad es que no sé dónde vamos a llegar con políticos de esta clase, aunque se les ve a las claras que ellos lo que quieren es adoctrinar a la sociedad para poder disponer de cuantos más siervos y lacayos posibles, haciendo demostraciones incluso de francotirador si es necesario, como hemos visto al Señor Ortega Smith esta semana.

No hay comentarios: